miércoles, 28 de marzo de 2012






Reflexiones visuales en torno a los múltiples nombres de la Diosa
Mis reflexiones visuales apuntan al resurgimiento de la Diosa y sus múltiples nombres. Desde tiempos inmemoriales, ella fue llamada “Señora del Mundo Subterráneo”, “Señora de las Aves”, “Señora de las Bestias”, “Reina del Universo”, “Señora de las Montañas”. Representada como Venus de Fertilidad, es Señora de las Rocas, Willendorf, Dama de Laussel, Señora de Kontieski. Llamada en oriente Inanna, Astarté, Isthar, Ashera, Lilith, Nammu, Laksmi, Saravasti, Kali, Tara, Kuan Yin. Ella es la “Diosa de la Vagina Sonriente” llamada Baubó. Es Afrodita, Artemisa, Ceres, Hécate, Démeter, Isis, Hathot, Sekmet, Bat. Es conocida en África y traída a América como  Yemayá, Oshum. Presente en las vírgenes, en cuya virginidad significa que es mujer “libre y sin dueño”: Es María de Nazareth, María Magdalena, del Carmen de la Tirana, Guadalupe, Monserrat. Es Chimalmán, Tlazolteoltl, Chalchihuitlicue, Camoho, Sedna, La Pincoya, Mamaquilla, Pachamama. Sus nombres fortalezas son múltiples y es una sola. Ella es la Diosa de la luna, la tierra y los mares, vertiendo por doquier magia, poder, paz y sabiduría. Es la eterna Triple Diosa, la doncella, la madre de todo y anciana de la oscuridad. Es el amor a todos los seres vivos, la que da conocimiento del eterno espíritu y más allá de la muerte, dando paz, libertad y reunión con todos aquellos que se han ido antes. Ella sí que no pide sacrificios, porque es la Madre de todas las cosas y su amor brota en toda la Tierra.

A través de estos dos montajes escultóricos, pretendo honrarla, porque la Diosa es el alma de la naturaleza que da vida al universo, de ella proceden todas las cosas y solo a ella regresan. Que estas obras sea un grano de arena en la ascensión del planeta, para que “todo acto de amor y placer sean sus rituales”, resurgiendo la Diosa con todo su amor cósmico. En la instalación escultórica “Pachamama”, intento representar manos que la abrazan en un gesto amoroso, de contención, sanación, en postura de reiki, buscando a nivel simbólico la restauración de su energía, tan dañada por el neoliberalismo. En el montaje “Madre Hay una Sola”, cada cuadro representa imágenes de diosas de la historia del arte y otras interpretadas y creadas por mí. Ambas obras intentan activar en el o la espectadora la memoria ancestral que nos haga reencontrarnos con los mejor de nosotras-nosotros mismos.

Pachamama

sábado, 31 de diciembre de 2011

Proyecto Escultórico; “Esculturas de terracota: la arcilla, una forma de reflexionar en la mujer”

La Diosa me hizo mujer...

"y Dios me hizo mujer, de pelo largo, ojos, nariz y boca de mujer. Con curvas y pliegues y suaves hondonadas y me cavó por dentro, me hizo un taller de seres humanos. Tejió delicadamente mis nervios y balanceó con cuidado el número de mis hormonas. Compuso mi sangre y me inyectó con ella para que irrigara todo mi cuerpo; nacieron así las ideas, los sueños, el instinto. Todo lo que creó suavemente a martillazos de soplidos y taladrazos de amor, las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días por las que me levanto orgullosa todas las mañanas y bendigo mi sexo". Gioconda Belli. 
Fondart 1994

Liberacion

viernes, 30 de diciembre de 2011

Proyecto escultórico “Madre hay una sola”

Mis reflexiones visuales apuntan al resurgimiento de la Diosa y sus múltiples nombres. Desde tiempos inmemoriales, ella fue llamada “Señora del Mundo Subterráneo”, “Señora de las Aves”, “Señora de las Bestias”, “Reina del Universo”, “Señora de las Montañas”. Representada como Venus de Fertilidad, es Señora de las Rocas, Willendorf, Dama de Laussel, Señora de Kontieski. Llamada en oriente Inanna, Astarté, Isthar, Ashera, Lilith, Nammu, Laksmi, Saravasti, Kali, Tara, Kuan Yin. Ella es la “Diosa de la Vagina Sonriente” llamada Baubó. Es Afrodita, Artemisa, Ceres, Hécate, Démeter, Isis, Hathot, Sekmet, Bat. Es conocida en África y traída a América como Yemayá, Oshum. Presente en las vírgenes, en cuya virginidad significa que es mujer “libre y sin dueño”: Es María de Nazareth, María Magdalena, del Carmen de la Tirana, Guadalupe, Monserrat. Es Chimalmán, Tlazolteoltl, Chalchihuitlicue, Camoho, Sedna, La Pincoya, Mamaquilla, Pachamama. Sus nombres fortalezas son múltiples y es una sola. Ella es la Diosa de la luna, la tierra y los mares, vertiendo por doquier magia, poder, paz y sabiduría. Es la eterna Triple Diosa, la doncella, la madre de todo y anciana de la oscuridad. Es el amor a todos los seres vivos, la que da conocimiento del eterno espíritu y más allá de la muerte, dando paz, libertad y reunión con todos aquellos que se han ido antes. Ella sí que no pide sacrificios, porque es la Madre de todas las cosas y su amor brota en toda la Tierra.

A través de estos dos montajes escultóricos, pretendo honrarla, porque la Diosa es el alma de la naturaleza que da vida al universo, de ella proceden todas las cosas y solo a ella regresan. Que estas obras sea un grano de arena en la ascensión del planeta, para que “todo acto de amor y placer sean sus rituales”, resurgiendo la Diosa con todo su amor cósmico. En la instalación escultórica “Pachamama”, intento representar manos que la abrazan en un gesto amoroso, de contención, sanación, en postura de reiki, buscando a nivel simbólico la restauración de su energía, tan dañada por el neoliberalismo. En el montaje “Madre Hay una Sola”, cada cuadro representa imágenes de diosas de la historia del arte y otras interpretadas y creadas por mí. Ambas obras intentan activar en el o la espectadora la memoria ancestral que nos haga reencontrarnos con los mejor de nosotras-nosotros mismos.


Pachamama

                                                                                                                                                                                                         


Madre hay una sola

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jueves, 29 de diciembre de 2011

Proyecto escultórico “Hay que puro echarse a volar”

Las relaciones de género dentro de un orden social patriarcal: 
La serie escultórica “Hay que puro echarse a volar”, del proyecto FONDART “Ellas están llegando: mujer, brujería y sanación” busca ser una expresión visual de las relaciones de género dentro de un orden social patriarcal. A mediados del último siglo y en forma paulatina las mujeres hemos ido recobrando la palabra robada por el patriarcado y nos han comenzado a salir alas para volar alto, en un vuelo autónomo, libre y sanador, dejando de ser “la hembra del hombre”. Este vuelo está desestabilizando las relaciones tradicionales de género al romperse mitos y prejuicios. Aun volando alto seguimos ligadas a la Tierra, nuestra Matria Sagrada. Este vuelo no ha estado exento de dolores y fracasos, puesto que el patriarcado reacciona pretendiendo cortarnos las alas. Este proyecto intenta recuperar las formas y colores ligados a la creación cósmica y a la simbología primigenia de las culturas matrísticas, con su espiral dinergética como símbolo de los ciclos vitales de la Tierra, en que lo femenino y masculino se relaciona armónicamente entre ellos y con la naturaleza. Busca provocar para el arte al espectador y espectadora, haciendolo sentir parte de la obra y participando en ella psicomágicamente.

La psicomagia como acto poético:
La serie escultórica busca accionar lo sensorial que la persona posee como un todo corporativo, acercándose a la obra con su propia historia, muchas veces cargada de actos destructivos. Aquí me encuentro con la psicomagia de Alejandro Jodoroswky planteada como un acto poético, donde el acto poético no es destructivo. Lo que importa es la creación de la metáfora e introducir los símbolos que provocarán un cambio sanador en los y las espectadoras. La metáfora puede ser interpretable de mil formas y un signo es interpretable de mil maneras, pero la forma de interpretar actuará sobre la persona. Los signos entregados en ésta serie, se relacionan con elementos que están en la psique de todas las personas y que se encuentran ocultos, apartados, aislados; y que la cultura dominante patriarcal los ha oscurecido, excluido, escondido y vilipendiado; por ser propio del mundo femenino y que requieren ser integrados por nosotros y nosotras por ser parte de nuestra psique. Así, el arte opera a través del acto metafórico para que lo realice la persona y de ese modo se convierta en su propio alquimista. 

Alas Caídas

Las Comadres



















Circulo Menstrual

Mujeres alzan vuelo I

Mujeres alzan vuelo II

Hay que puro echarse a volar